Con el estreno de “Star Wars: El despertar de la Fuerza” a la vuelta de la esquina, no es de extrañar que Inmoov, un robot con similitudes más que evidentes con el mítico C-3PO de la franquicia cinematográfica de ópera espacial épica, haya vuelto a aparecer en escena. Además, su creador, el francés Gael Langevin, también ha presentado su particular robot en el festival de tecnologías creativas Maker Faire Bilbao, una feria para exponer proyectos ligados al “hazlo tú mismo” y al conocimiento abierto o libre.
InMoov (que nació en 2012) tiene la particularidad de medir 1,80 centímetros de alto y de ser muy habilidoso: puede abrazarte, coger a niños en brazos y mecerlos o servirnos bebidas con sus propias manos. Lo único es que no es dorado (es blanco), ni habla seis millones de idiomas como el robot de Star Wars -y no tiene piernas- pero puedes construirlo tú mismo en casa con el único requisito de paciencia y una impresora 3D pequeña (12x12x12).
Esto se debe a que el robot ha sido desarrollado con software de código abierto u open source, por lo que está a disposición de quien lo quiera utilizar o incluso mejorar. El hardware se basa en tecnología Arduino, también de código abierto. Cada persona es libre de descargarse los planos de la red y seguir las guías de montaje mediante vídeos paso a paso. El coste de imprimir y construir a InMoov asciende a unos 800 euros.
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